viernes, 1 de noviembre de 2019

Peronismo en clave feminista como garantía de Justicia Social



Por Viviana Taylor


El 18 de octubre, en la CTA Regional General Sarmiento (San Miguel – Malvinas Argentinas – José C. Paz), se realizó la presentación del libro “Feminismo y Peronismo. Reflexiones históricas y actuales de una articulación negada”, con la presencia de su compiladora Estela Díaz, y Cristina Álvarez Rodríguez, una de sus autoras.




Del panel participaron, además, Graciela “Cacha” Rodríguez –Secretaria de DDHH de SUTEBA-, Claudia Borras -dirigente del Movimiento Evita de San Miguel-, Delfina del Carmen Pérez –Secretaria de la Mujer del PJ San Miguel- y yo, Viviana Taylor, referente de “Educación y Territorio San Miguel”, todas por entonces candidatas por el Frente de TODOS de San Miguel.
Al final, se invitó a sumarse con unas palabras a Gabriela Diker –rectora de la UNGS- quien estaba en el público. Y a Franco La Porta –candidato a intendente por el Frente de TODOS de San Miguel-  quien dedicó unas palabras de reconocimiento a las autoras y al panel.


A continuación mi participación, sobre feminismo y Justicia Social


Aquí en San Miguel, nuestro peronismo feminista nació de la práctica política militante, que está construyendo colectivamente una síntesis entre una nueva forma de ser peronistas, enarbolando las banderas que nos identifican a través del camino del feminismo popular; y una nueva forma de ser feministas, a través de la organización política, para promover políticas que incidan directamente sobre la situación concreta de la vida de mujeres y disidentes sexuales y de género, sobre las diferencias determinadas por nuestras condiciones de clase, de origen étnico, de género y sexuales.
Sostenemos que la INDEPENDENCIA ECONÓMICA no será, si no es a través de la eliminación de las brechas salariales y las condiciones laborales diferenciales entre varones, mujeres y disidentes.
No será hasta la plena vigencia del derecho al trabajo para todes, que hoy requiere del efectivo cumplimiento de la Ley de Cupo Laboral Travesti-trans, que en San Miguel está aprobado hace más de un año y no es aplicado. Pero tampoco será si el cupo, al igual que el destinado a personas con discapacidad, se convierte en objetivo último y no en estrategia de construcción hacia el verdadero objetivo que es el logro del derecho que exigimos: trabajo para todes, con la misma remuneración e idénticos derechos.
No podemos seguir tolerando que a parte de nuestra sociedad se le ofrezca la explotación sexual y laboral como único camino, y la condena a una expectativa de vida de 35 años, menos de la mitad que la del resto de la población. Tolerar es avalar un genocidio por goteo, que es lo que definitiva está proponiendo un sistema del que se ufanan públicamente algunes polítiques, como la legisladora Elisa Carrió. Es hora de que dejemos de tolerar lo intolerable.
INDEPENDENCIA ECONÓMICA que tampoco no será mientras las amas de casa no sean reconocidas como trabajadoras que sostienen el sistema económico, y junto con trabajadoras domésticas y otres trabajadores precarizades, no vuelvan a acceder al derecho jubilatorio.
Un reconocimiento que debe ir acompañado por el compromiso del Estado en:
Ø  su participación en las tareas  de cuidado, a través de la creación de jardines maternales y de infantes, de escuelas infantiles, y centros de encuentro para adultos mayores, que sean suficientes y con extensión al turno vespertino, para garantizar el derecho de les cuidadores al estudio, el trabajo, y el tiempo libre, que es condición de salud;
Ø  y en la creación de programas de incentivo para el establecimiento de proyectos productivos, destinados a víctimas de violencia de género y personas en riesgo social y económico.


También luchamos por nuestra SOBERANÍA POLÍTICA, y por eso exigimos paridad en la representación para igualdad en el poder.
Hemos logrado paridad de mujeres en las listas, pero vamos por más. Nuestro desafío es que sea con feministas en las listas, y con paridad en cada ámbito del gobierno y de la vida pública: paridad de políticas, de periodistas, de deportistas, de científicas, de académicas, de editoras, de juristas, de artistas… Y que avancemos en la representación de travestis, trans y no binaries: así como las mujeres aprendimos que los varones no pueden ser nuestra voz, nosotras tampoco podemos ser la voz de les disidentes.


Afirmamos que la JUSTICIA SOCIAL sólo es alcanzable a través de la integración real y efectiva, que permita a cada uno, cada una y cada une elegir y desarrollar su propio proyecto de vida.
Por eso proponemos un sistema municipal de salud pública integral, con equipos interdisciplinarios de profesionales especializados en salud transexual-transgénero; con acceso libre y gratuito a los métodos anticonceptivos, y libre disponibilidad de kits de anticoncepción hormonal y antirretrovirales para casos de violación y abuso. Con atención inmediata a casos encuadrados en la ILE (interrupción legal de embarazo), y con atención efectiva a la interrupción voluntaria de embarazo en cuanto se apruebe la ley que garantice aborto legal, seguro y gratuito en los hospitales públicos, ley que no dejamos de exigir para terminar con la clandestinidad que condena a la pérdida de capacidad reproductiva y la muerte a miles de mujeres por año, para beneficio del enorme negocio que los laboratorios medicinales hacen con el misoprostol.
Como parte de este enorme negocio, del que es cómplice un gobierno sólo presente para favorecerlos, hoy –en la salud pública de nuestro país- no se provee de testosterona a los varones trans, ya que el laboratorio que la produce prefiere pagar la multa con que se pena su falta de provisión antes que afrontar los costos incrementados por la devaluación. Y el gobierno, coherente en su lógica antiderechos, prefiere hacer caso omiso a los reclamos por el riesgo en la salud que esta falta conlleva, y que pone a los varones trans en riesgo de muerte, y cobrar la multa mientras ajusta: doble ganancia. La misma situación la están sufriendo quienes esperan la provisión de hormonas para tratamientos de fertilidad.
Exigimos que en San Miguel se cumpla con el protocolo de la ILE, que nos es negada, y que se erradiquen las prácticas de violencia sexual y obstétrica, enraizadas en la Consejería Guadalupe.
Una salud pública integral que respete en todo momento el derecho a la intimidad, a la integridad, y a la identidad. Que articule con el sistema educativo programas de ESINB (Educación Sexual Integral No Binaria), con proyectos específicos para acompañar a niñes y adolescentes trans y a sus familias y docentes: infancias y adolescencias libres y felices generan adultes sanes y sociedades mejores.
Y que se articule con una red integrada e integral de instituciones educativas, culturales, deportivas, recreativas, comunitarias…, que promuevan actividades inclusivas y equitativas para varones, mujeres y otres.
Una JUSTICIA SOCIAL que, además, exige acceso a la Justicia: que dé respuestas inmediatas ante las denuncias de violencia de género, y que sea capaz de actuar preventivamente, con centros de cercanía. No queremos seguir llorando ausencias previsibles por inacción del Estado.

SIN PERONISMO FEMINISTA NO HAY JUSTICIA SOCIAL

VIVES, SANES, LIBRES, EDUCADES, TRABAJADORES, ORGANIZADES Y GOBERNANDO
NOS QUEREMOS

¡NI UNE MENOS!

   
    



Viviana Taylor